Junto a un equipo de entre 5 y 10 colaboradores el ingeniero de Google Rio Akasaka ha pasado un año mejorando Google Maps, utilizando el 20% de tiempo de su jornada laboral que permite la compañía.
El añadido que han introducido es bastante sencillo: todos los comerciones y localizaciones de Google Maps tienen unas etiquetas, seleccionadas por usuarios, para describir el lugar. Entre las etiquetas, gracias a Akasaka y su equipo, ahora se puede marcar si un sitio es fácilmente accesible con silla de ruedas. Este indicación también está pensada para otras personas con problemas de movilidad.